
Es un vino para tomar acompañando a postres, su sabor dulce intenso puede intensificar el sabor de cualquier postre dulce: pasteles, helados, etc.
Actualmente se está extendiendo mucho el maridaje en otros platos, por ejemplo la carne al Pedro Ximenez o los platos con salsa de reducción de Pedro Ximénez (normalmente una reducción del 50% aproximadamente, lo que da un sabor muy dulce al plato que acompañe).
También se usa en combinación con otros vinos para crear variedades intermedias, como es el caso del cream.